El nuevo desafío del posicionamiento de marca en la era de la Inteligencia Artificial Generativa
El entorno digital está viviendo una transformación sin precedentes. Durante años, el punto de partida del usuario en internet fue siempre el mismo: Google. La visibilidad de marca se construía a partir del posicionamiento en buscadores, las campañas en redes sociales y, más recientemente, los esfuerzos en Retail Media. Sin embargo, una nueva fuerza ha irrumpido con una velocidad extraordinaria: la Inteligencia Artificial Generativa.
La aparición de plataformas como ChatGPT, Gemini, Claude o Perplexity ha modificado el comportamiento del usuario digital. Hoy, las personas conversan con asistentes de IA para buscar respuestas, investigar productos, planificar compras e incluso iniciar el proceso completo del buyer journey. La audiencia se está moviendo, y las marcas tienen una pregunta urgente que responder: ¿estamos presentes donde nuestros consumidores ya están?
La audiencia migra hacia la IA
El caso de ChatGPT es revelador: en tiempo récord se convirtió en uno de los cinco sitios más visitados del mundo. Lo más relevante es que su explosivo tráfico no es adicional, sino que proviene de plataformas donde antes se concentraba la atención —principalmente Google y redes sociales—. La curva de crecimiento de la IA es constante y acelerada, mientras que las búsquedas tradicionales se estancan.
Aun así, el cambio no implica sustitución inmediata. El 95 % de usuarios de ChatGPT también busca en Google. Esto confirma que, por ahora, la IA es un complemento, no un reemplazo. Pero un complemento que está ganando terreno clave: el tiempo y las decisiones de los consumidores.
La IA como nuevo canal de performance
Uno de los hallazgos más sorprendentes del análisis presentado es que la IA ya no solo informa: convierte. ChatGPT exhibe una tasa de conversión hacia sitios web superior al tráfico directo, al orgánico y al pagado en múltiples sectores. Cuando un usuario navega desde un chatbot hacia una marca, lo hace con una alta intención y nivel de decisión.
Esto significa que la IA se está consolidando como un nuevo canal de performance marketing. La experiencia conversacional reduce fricciones, aclara dudas y entrega recomendaciones basadas en contexto. La marca que no aparezca como respuesta, simplemente queda fuera del radar.
La Inteligencia Artificial como “nuevo juez” de visibilidad
El estudio comparativo entre industrias en México, Chile, Argentina, Perú y Colombia muestra que la IA ya está influyendo en decisiones reales: desde qué supermercado o retail visitar, hasta qué banco usar, qué operador elegir o qué universidad considerar.
La relevancia de una marca dependerá de si la IA la reconoce como autoridad en su categoría. Esto introduce una lógica nueva en el marketing digital: ya no es suficiente optimizar para buscadores; ahora hay que optimizar para los modelos de IA.
Google contraataca: el AI Mode
Consciente del cambio, Google ha comenzado una reinvención interna. Su nuevo AI Mode, integrado en Search, busca recuperar protagonismo frente al crecimiento de ChatGPT. Actualmente, una cuarta parte de quienes navegan en Google ya ha probado este modo conversacional.
Sin embargo, la adopción sostenida aún es un desafío: la mayoría lo prueba una vez y no regresa. No obstante, la señal es clara: Google no piensa ceder el liderazgo y su ecosistema seguirá evolucionando rápidamente.
¿Qué deben hacer las marcas?
El mercado se dirige hacia una nueva normalidad: el consumidor se informa conversando con una IA. La pregunta ya no es si debemos actuar, sino cuán rápido debemos hacerlo. Las marcas necesitan:
- Desarrollar contenidos indexables, confiables y profundos que la IA pueda citar.
- Ser fuente útil en la conversación del usuario.
- Asegurar presencia en todos los entornos digitales donde hoy ocurre la búsqueda.
El posicionamiento de marca ya no se juega únicamente en motores de búsqueda: ahora también depende de la capacidad de la IA para recomendar, decidir y persuadir.
Conclusión
Estamos ante un momento de inflexión. Los consumidores ya adoptaron la IA como una herramienta habitual para resolver dudas, comparar opciones y tomar decisiones de compra. La visibilidad “tradicional” sigue siendo importante, pero hoy la primera interacción con la marca puede venir desde un asistente conversacional.
Las empresas que actúen ahora tendrán una ventaja competitiva enorme: serán las marcas que la IA aprenderá, reconocerá y recomendará. Las que tarden, quedarán fuera del nuevo sistema de búsqueda que, sin duda, llegó para quedarse.






